Mi padre a caído el día 3 de este mes desde la segunda planta de mi casa, esto es equivalente a aproximadamente 2 a 2.5 m de altura, ayer la cabeza me giro mil veces cuando recibí la llamada de mi hermana para decirme lo ocurrido… padre, cráneo, TCE, hemorragia, traumatismo raquimedular, fracturas múltiples, perforación, Hemoneumotorax, neumotórax, sangrado, hemorragia, cirugía, dolor y muerte… son tan solo algunas de las palabras que llegaron a mi mente, de pronto no existió nada en este mundo para mi que la vida de mi padre, y tampoco existió ser mas calculador, frio y autómata como yo para iniciar acciones necesarias para recibir a un paciente policontundido…
Mande a “mis gordas” por un tubo, pedí permiso y me ausente de mi servicio (urgencias obstétricas), nadie moría si me ausentaba, nadie se quedaba desprotegido, pero si alguien me necesitaba…
Antes de llegar la ambulancia ya estaba avisado el internista, avisado el traumatólogo, avisados lo radiólogos y avisado trabajo social, no perdí minutos en papeleos, solo en trámites necesarios, realice en mi cabeza la revisión más exhaustiva de cada gota de información que recibía por parte de los especialistas, fui mi juez, verdugo y premiador en un segundo, me deprimí y consolé en un triss…
Antes de que el llegara entre al baño, orine (para que después esta necesidad no me diera lata en algún punto clave), lave mis manos mas minuciosamente de lo que siempre lo hago, solté mi cabello de un lado, lo escarmene un poco, de nuevo lo amarre, moje mi cara y derrame un par de lagrimas y después de dejarlas correr un poco, las enjugue para que no me nublaran la vista, seque mi rostro y salí a recibir al paciente más importante hasta ahora en mi vida…
Probable fractura de T11 (vertebra número 11 correspondiente a la columna dorsal o torácica, una de las 5 divisiones del raquis) fue el primer diagnostico que se dio, descartar compresión medular y datos de compromiso medular, una bocanada…
Sin compromiso medular, sin daño neurológico y lo más importante, sin algo que ponga en riesgo su vida… otra bocanada…
Se requiere nueva TAC y valoración por parte del traumatólogo después de ello… pausa…
Traslado a la unidad de seguridad social que cubre a mi padre, a su ingreso un antiguo maestro, inteligente para mi suerte… pase a piso y de nuevo remarcar, fuera de peligro… una nueva bocanada…
Ya en piso, ya oficialmente internado, con el dolor más domado, la familia con menos miedo y todo más estable… nueva TAC revela… sin fractura el columna, con lesión y contusión, ah, novedad… la familia más querida llega a dar ánimos y una fractura en costilla cerca de unión costovertebral se revela en la tan esperada TAC… una bocanada doble para llevar…
Alta el día 7, mejor regalo de cumpleaños no pude recibir… he respirado después de tanta bocanada incompleta…
Mis sentimientos encontrados, la medicina, mi estrés, mi nervio, mi profesión y yo estamos redactando esta nueva entrada y un aire de optimismo se asoma por la ventana… tal vez solo tal vez si el destino que marca el de allá arriba quiere, tal vez pueda salir a algún lugar a intentar tomar al menos un par de días vacaciones.
Lección toon del día: Mente fría, comportamiento congruente, rápido y bien hecho, medicina de calidad, pensamientos de análisis, tristeza bien enfocada, estrés canalizado y bocanadas de aire, una rara combinación que al día de hoy me ayudaron para enfocarme en quien amo… esta lección es hoy para mí, lo siento lectores esta vez es a la salud de mi padre.
Recomendación de hoy: Mi padre – Vicente Fernández
